Mendoza asume el financiamiento de obras públicas ante la falta de recursos nacionales

Ante la paralización de la obra pública a nivel nacional, el Gobierno de Mendoza decidió financiar con recursos provinciales 11 proyectos clave en infraestructura de viviendas, agua y saneamiento. Estas obras, que inicialmente contaban con financiamiento del Estado nacional, requerirán una inversión superior a los $50.000 millones, sin una perspectiva clara de reembolso por parte de Nación.

Durante la última semana, el gobernador Alfredo Cornejo entregó viviendas en Santa Rosa, en un barrio desarrollado bajo el programa nacional Reconstruir, que dejó de recibir fondos nacionales. En este contexto, el Estado mendocino asumió el 100% de la financiación para su finalización. “Estos barrios estaban financiados por el Estado nacional, pero la nueva administración decidió cancelar ese financiamiento. La provincia, en acuerdo con los municipios, asumió la finalización con recursos propios”, explicó Cornejo.

Desde la Subsecretaría de Infraestructura, se confirmó que Mendoza tomó el control de seis proyectos de viviendas que eran financiados por el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) y cinco obras de agua y saneamiento que estaban bajo la órbita del disuelto Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa). Aunque se firmó un convenio con Nación para la finalización de las viviendas con un aporte comprometido de $2.000 millones, hasta la fecha solo se han recibido $200 millones, por lo que la provincia continúa con la ejecución de los trabajos.

Las obras de saneamiento incluyen el colector cloacal Colonia Segovia-El Paramillo, la renovación del colector cloacal entre Elpidio González y Estrada, la ampliación del Establecimiento Depurador de Cuadro Nacional y la ampliación de la Planta Potabilizadora Balloffet, ambas en San Rafael. También se encuentra en desarrollo el Sistema de Producción y Provisión de Agua Potable del Pedemonte Norte, destinado a abastecer barrios de El Challao y el oeste de Las Heras.

El financiamiento de estos proyectos proviene de las rentas generales de la provincia y, según la Subsecretaría de Infraestructura y Desarrollo Territorial, Mendoza continuará con las gestiones para obtener un reembolso por parte de Nación. Sin embargo, las perspectivas en el corto plazo no son optimistas.

En cuanto a la infraestructura vial, Mendoza mantiene negociaciones con Vialidad Nacional para reactivar la doble vía de la Ruta 40 en Lavalle, actualmente paralizada. Por otro lado, la Variante Palmira, clave para el tráfico de camiones en el Gran Mendoza, sigue en ejecución con pagos al día, mientras que la reconstrucción de los puentes caídos en la Ruta 40 hacia Tunuyán avanza con financiamiento nacional.

Con estas decisiones, Mendoza busca garantizar la continuidad de obras esenciales para la provincia, a pesar de la retirada de financiamiento por parte del Gobierno nacional. El desafío ahora será sostener la inversión y buscar alternativas para recuperar los recursos destinados a estos proyectos.

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