La reactivación de la obra pública

La reactivación de la obra pública y la esperanza de mejoras viales
Uno de los trabajos que afectó la suspensión del envío de fondos nacionales fue el de las obras viales iniciadas en distintos puntos de la provincia. La reactivación de la Calle 5 renueva esperanzas en varios municipios.

El freno que el Gobierno nacional impuso a la obra pública, como una medida de contención del gasto y control de erogaciones en búsqueda del equilibrio fiscal, hizo que en San Juan se suspendieran numerosas obras ya iniciadas o que están en su etapa de proyecto, muchas de las cuales son viales, por lo que la gente anhela su ejecución y terminación en términos acorde a las necesidades que implican esos trabajos.

A cinco meses del inicio de gestión y de que dejaran de llegar los fondos para las obras, el gobernador Marcelo Orrego -aprovechando el compromiso de la Nación de reconocer el pago de obras adeudadas y realizadas por la anterior gestión- dispuso reactivar el sector retomando por ejemplo la construcción de la Calle 5, entre Pocito y Rawson, una obra largamente anhelada por su importancia para el intenso tránsito vehicular de una de las zonas más productivas de la provincia. Esta decisión es la que ha generado una gran expectativa en varios municipios de la provincia que tienen obras, en su mayoría viales o vinculadas con estas, para terminar y satisfacer el reclamo de la comunidad que cada vez es más insistente. Entre esas obras está la del Acceso Este a la ciudad de San Juan (en jurisdicción del departamento Santa Lucía), que fue construido en forma provisoria de una manera muy angosta, sin banquinas y con calles laterales que no están pavimentadas, lo que ocasiona serios riesgos y molestias al intenso tránsito que se canaliza por esta vía.

En el límite de Capital con Rivadavia, la calle Sargento Cabral está a la espera de una remodelación que incluya pavimento y ensanche justificado por la gran cantidad de vehículos que circulan a toda hora del día. Este proyecto ya ha sido considerado por ambas comunas faltando los fondos para su ejecución.

En Caucete, al igual que en Rawson y parte de Rivadavia, tras la construcción de los sistemas cloacales han quedado muchas calles de jurisdicción provincial sin su carpeta asfáltica. La Avenida de los Ríos, desde Diagonal Sarmiento hacia el Este, en el primer departamento, es un ejemplo de lo necesario de estas obras en sectores densamente poblados.

En Zonda, el Acueducto del Tulum no es una obra eminentemente vial pero incluye el túnel que posibilitará el transito turístico por la zona. Este emprendimiento junto al tramo de la Ruta 40 Sur, entre Tres Esquinas y Cochagual, figuran entre las obras con mayores posibilidades de reactivación por contar con la financiación del BID (Banco Interamericano de Desarrollo). De la misma manera hay otras obras que no son viales, como la del hospital de Calingasta, pero que como está en un 37% de su ejecución existe la intención de finalizarlas.

De todas maneras las autoridades del Ejecutivo Provincial han consignado que la decisión referida a qué obras serán las se reactivarán se irá tomando mes a mes, en la medida que se conozcan los fondos disponibles.

Si bien hay muchos trabajos necesarios que la comunidad reclama, las obras viales constituyen una de las mejoras más preciadas ya que, una vez realizadas, otorgan una serie de ventajas vinculada a una mejor calidad de vida en cada zona.

Fuente: https://www.diariodecuyo.com.ar/