La construcción creció más del 6% en el primer semestre y superó los 450.000 puestos de trabajo

Por su efecto multiplicador en la economía, la construcción es la segunda actividad en importancia del país por su nivel de empleo y la cuarta por su contribución a la formación del producto bruto interno (PBI).

No contribuye con divisas porque no participa de las exportaciones, aunque atrae a inversores extranjeros por épocas, y sí es demandante de dólares para importar maquinaria e insumos, pero lo compensa con el valor añadido y la generación de trabajo. 

Esta cadena productiva, que moviliza a una gran cantidad de actividades de bienes y servicios relacionados, generó 1,17 millón de puestos de trabajo directos e indirectos a nivel nacional (9,61% del total) y casi $726.000 millones de valor agregado bruto (6,41% del total) el año pasado, según datos del Ministerio de Economía. 

Una característica adicional de este sector es que para el capital resulta un refugio de valor en tiempos de incertidumbre financiera, ya que muchos proyectos para renta captan inversores de pequeña y mediana escala, además de los desarrolladores tradicionales. Apostar al ladrillo, que se mueve en torno al dólar siempre ha sido una opción segura para los ahorristas. 

La obra pública como motor del desarrollo 

Por otro lado, y más allá de la inversión privada, la cadena productiva recibe la influencia de la inversión en obra pública, tanto para obras civiles como planes de viviendas a nivel federal, que aportan oportunidades para constructoras, proveedoras pymes y demanda de empleo en sus áreas de influencia.

Esta política de inversión estatal del Ministerio de Obras Públicas tiene en ejecución 5.014 obras y 979 proyectos distribuidos en las 23 provincias más CABA, que permitieron llegar a 1.501 de los 2.311 gobiernos locales del país.

En el último Informe de Coyuntura sobre Trabajo y Obra Pública, publicado por esa cartera en mayo, se destaca que hasta marzo había 420.279 empleos registrados en la construcción, lo que implica un 18,4% más que en igual mes del año pasado y 60.504 puestos más que en marzo de 2020 (primer mes de la pandemia).

“Actualmente hay un récord de 450.000 puestos de trabajo en el sector de la construcción, pero nosotros aspiramos a llegar a los 500.000, todos formales, de calidad y bien pagos, que representan lo que viene pasando en el sector de la construcción», declaró el ministro Gabriel Katopodis la semana pasada a raíz de la presentación de 7 de las 120 obras estratégicas del programa Argentina Grande, que implican $71.000 millones de inversión estatal.

Una de las tres paritarias con mayores aumentos 

Y además, por el alto nivel de sindicalización de sus trabajadores, en su mayoría afiliados a la UOCRA, se reducen los niveles de informalidad, tienen condiciones de seguridad e higiene laboral unificadas y participan de convenios colectivos de trabajo.

De hecho, en mayo se cerró la paritaria 2022 con un aumento del 62% (igual suba que Comercio y Gastronómicos) en 8 tramos, acordado entre el sindicato que lidera Gerardo Martínez y la cámara empresaria, y con un pacto de revisión en noviembre.

A diferencia de otras cadenas productivas, que dependen de muchas variables, para saber cómo se encuentra la actividad de la construcción hay un indicador clave que utilizan todos los analistas: los despachos de cemento Porland.  

Por ejemplo, en mayo último se vendieron 1.104.100 toneladas en el país, lo que representa una suba interanual del 24,5%. El insumo que más creció sin embargo es el hormigón armado (54%), mientras que el aumento del 19,2% en el consumo aparente de asfalto da cuenta de la evolución de la obra pública vial.

Cuando se interrumpe la inversión en obra pública y se paralizan muchos proyectos, estos indicadores muestran caídas dramáticas, pero a poco de retomarse o al surgir nuevos las subas son automáticas y constantes.

La actividad creció casi 20% interanual en mayo 

El índice Construya, creado en 2002 por un grupo de 12 empresas líderes del sector, también es un indicador valioso para relevar el nivel de actividad y evaluar la recuperación en el despacho de materiales.

En junio registró una variación mensual desestacionalizada de 3,4% con respecto al mes anterior y del 4,9% comparado con igual mes del año pasado, cerrando el primer semestre de 2022 con 9,1% acumulado por encima del mismo periodo de 2021. 

En el primer trimestre de 2022 la actividad de la construcción creció un 3% con relación a igual período del año pasado, generó un valor agregado bruto de $2,4 billones y una formación bruta de capital fijo de $4,43 billones a precios corrientes.

El último registro disponible del INDEC de mayo de 2022 muestra que el indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC) subió el 19,9% con respecto a igual mes de 2021.

El índice de la serie desestacionalizada muestra una variación positiva de 0,4% respecto a abril pasado y el índice serie tendencia-ciclo registra una variación positiva de 0,8%.

Así, el acumulado de los cinco primeros meses del año en curso del ISAC presenta una suba de 6,3% respecto a igual período de 2021. 

Llegan a 470.000 los trabajadores del sector privado 

En cuanto al nivel de empleo, el último dato disponible del INDEC corresponde a abril y da cuenta de 420.608 puestos de trabajo registrados en el sector privado, con una variación interanual del 17,9% para el citado mes.

La superficie autorizada por los permisos de edificación, otorgados para la edificación de obras privadas en una nómina de 176 municipios, rozó los 1.392.000 metros cuadrados, con una variación interanual para abril del 0,8%.

El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), Gustavo Weiss, en declaraciones a la agencia Télam, estimó que la actividad del sector creció entre 6 y 7% en el primer semestre del año y aclaró que el empleo sigue creciendo mes a mes hasta alcanzar en la actualidad 470.000 puestos, tanto en jornalizados como personal mensualizado.

El líder empresario comentó además que algunas constructoras tienen dificultades a nivel país para contratar mano de obra especializada, con experiencia, técnicos, capataces e ingenieros, aunque en muchos emprendimientos se pagan salarios por encima de la paritaria sectorial.

La situación global y la macro y microeconómica local repercuten en esta actividad como en las demás, pero también impactan fuerte la tasa de interés y el tipo de cambio, la poca oferta de créditos hipotecarios y la debatida ley de alquileres, los vaivenes de la obra pública, entre otras variables.

Encuesta de perspectivas empresarias de corto plazo 

Los resultados obtenidos por la encuesta cualitativa de la construcción, realizada a grandes empresas del sector, muestran expectativas favorables con respecto al nivel de actividad esperado para el período junio-agosto, se dediquen a realizar principalmente obras privadas o públicas.

En efecto, 62,7% de las empresas que realizan principalmente obras privadas prevé que el nivel de actividad del sector no cambiará durante los próximos tres meses, mientras que 28,8% estima que aumentará y 8,5%, que disminuirá.

Las empresas que prevén una suba del nivel de actividad durante los próximos tres meses la atribuyen, sobre todo, a nuevos planes de obras públicas (27,4%), al crecimiento de la actividad económica (25,5%) y al reinicio de obras paralizadas (19,6%), entre otros factores.

Entre las empresas dedicadas sobre todo a la obra pública, 56,6% opina que el nivel de la actividad no cambiará durante en estos tres meses, mientras que 31,6% cree que aumentará y 11,8%, que disminuirá.

Quienes estiman una suba del nivel de actividad durante los próximos tres meses la atribuyen a nuevos planes de obras públicas (39,6%), al reinicio de las pendientes (21,5%) y al crecimiento de la actividad económica (19,4%), entre otros motivos.

Fuente: Politica y Medios