Estiman que las cuotas de las obras en pozo podrían subir un 15% por el «costo Covid»

Estiman que los sobrecostos podrían llegar hasta el 15% por los nuevos protocolos.

En los rubros que participan del sector de la construcción esperan que en las próximas semanas la Ciudad habilite la vuelta al trabajo. Sin embargo hay incertidumbre por saber cuántos de los compradores podrán mantener el pago de cuotas y por conocer cuál será el impacto de los protocolos contra el Covid-19 en el precio del metro cuadrado.

Damián Tabakman, titular de la Cámara de Desarrolladores Urbanos, estima que habrá sobrecostos de entre un 10 y 15% del precio por metro cuadrado. «En el interior están con los mismos protocolos, pero es difícil compararlos porque acá los costos del transporte son otros y es un problema. La gente en general vive lejos de las obras», explicó.

En los protocolos diseñados para el sector existe la obligación de, entre otras cuestiones, garantizar el viaje de los trabajadores a las obras, ya que tienen prohibida la utilización de transporte público por no estar dentro de los «esenciales».

Además hay otros factores: «por el distanciamiento social las obras serán menos eficientes», dijo aunque definió como «una locura» pensar en flexibilizar los protocolos.

«La principal dificultad es que en el AMBA estamos parados y las empresas están cerradas con gastos que siguen corriendo, eso genera sobrecostos que pueden ser enormes», explicó Tabakman a LPO.

En el sector aseguran que hay 5000 obras paradas por la pandemia que emplean aproximadamente a 130 mil personas y se supone que en la segunda mitad de septiembre podrían volver a funcionar. Por el momento solo están abiertas las construcciones que corren peligro de derrumbe.

Tabakman señaló que el financiamiento de la obra tiene dos patas: una es el desarrollador y la otra los compradores. La incertidumbre por saber qué sucederá con aquellos clientes que tienen negocios que sufrieron las consecuencias de la economía pandémica se mantendrá hasta que se reanuden las construcciones. De todas formas mientras no hay obras, los clientes no pagan.

«Que el costo de construcción medido en dólares se abarató por la devaluación es obvio, pero también los salarios de los inversores están pesificados. Si es suficiente para reactivar hay que verlo», dijo. Según explicó El Cronista son muy pocos los países que suspendieron la totalidad de las obras desde que comenzó la pandemia.

Fuente: La Politica on Line