Gestionan obras anexas al futuro puerto itaibateño
El fin es mitigar los efectos negativos del proyecto. Se planea construir defensas costeras y un Observatorio de Peces. Y prevén nuevo plan de ordenamiento vial.
El puerto se construirá en dos años, con una inversión de $180 millones. Optimizará la actividad agrícola regional con las cargas procedentes del país, del Brasil y del Paraguay.
La comunidad de Itá Ibaté acudió a la Audiencia Pública Ambiental sobre los efectos de la futura terminal portuaria, cuyas obras demandarán dos años desde su inicio.
El proyecto depende del Ministerio de Obras y Servicios Públicos, y el encuentro fue organizado por el Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (Icaa) en el Casino de Sub-Oficiales de Prefectura Naval Argentina, donde asistieron productores arroceros y representantes provinciales y municipales.
Al final del encuentro se firmó una declaración de interés del puerto, con un anexo sobre obras complementarias para mitigar los efectos negativos de la obra, como la reducción del área de pesca.
Las autoridades municipales y legislativas apuntan a un turismo sustentable, potenciando la productividad arrocera y sin descuidar la pesca.
OBRAS EXTRA
El viceintendente de Itá Ibaté, Ramón Camelino, asistió en representación del Ejecutivo municipal y el Concejo Deliberante.
En diálogo con EL LIBERTADOR, adelantó que propuso un plan de obras complementarias para mitigar el impacto negativo del puerto.
El plan incluye la construcción de defensas costeras, la conformación de un Observatorio de Peces, para controlar el ambiente de la fauna íctica, y mayor equipamiento para el hospital Inmaculada Concepción.
«Pedimos un tomógrafo y un equipo de rayos para que el hospital se encuentre en condiciones de atender los accidentes durante y después de la obra», detalló Camelino.
También prevé un plan de ordenamiento urbano por el crecimiento que implicará el funcionamiento del puerto en la localidad.
Camelino consideró que la audiencia fue muy positiva por la recepción del sector arrocero.
«La obra es fundamental para reducir costos y aumentar la productividad arrocera», agregó.
Sin embargo, la construcción modificará el área de pesca, uno de los atractivos de Itá Ibaté.
«Hay que cuidar y potenciar el desarrollo del turismo sustentable», indicó.
Tras la audiencia, consideró que se entró en la última etapa de gestiones antes del proceso de licitación.
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