Las constructoras y la UOCRA buscan agilizar la obra pública

Para el Gobierno la industria de la construcción podría mover la economía pero la emergencia sanitaria impone restricciones presupuestarias. Empresarios piden, al menos, poner al día la deuda de la obra pública.

n medio de la emergencia sanitaria que obligó al presidente Alberto Fernández a decretar la cuarentena total en todo el país, sorprendió la inclusión de la obra pública entre las actividades exceptuadas de la dura medida. De hecho, el mismo jueves, horas antes de que entrara en vigencia el DNU 297/2020, hubo contactos de empresarios del sector y el gremio de la construcción con funcionarios del gabinete.

En la lógica del Gobierno, la industria de la construcción será uno de los motores de la reactivación económica. Pero con la construcción privada muy golpeada por la recesión, la falta de crédito y ahora el impacto de la cuarentena, desde el Ejecutivo saben que la obra pública jugará un rol clave.

El  jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, recibió al hombre fuerte de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), Gerardo Martínez, y al flamante titular de la Cámara Argentina de la Construcción, Iván Szczech. Allí pasaron revista a los principales puntos de la agenda sectorial, como el plan de viviendas y obra pública que está terminando de diseñar el Gobierno, la deuda atrasada por contratos en ejecución y la redeterminación de precios para compensar la inflación.

Y también se acordaron encuentros con los ministros María Eugenia Bielsa (Desarrollo Territorial y Hábitat) y Gabriel Katopodis (Obras Públicas). Se habló de activar licitaciones de obra de desarrollo urbano en el marco del plan Procrear y construir de 15 a 20 mil viviendas «para la urgencia».

«El primer objetivo es que se pague lo que se adeuda, que llega a unos $ 35.000 millones» por obras ya ejecutadas, señaló Iván Szczech. Desde el Gobierno les pidieron a las empresas que se comprometan a mantener la continuidad de las obras y crear la mayor cantidad posible de empleos.

El mayor problema es la escasez de recursos. Con la llegada del coronavirus al país, en despachos oficiales creen que hasta mayo o junio la prioridad es atender la emergencia sanitaria. Todo lo demás, deberá esperar.

Fuente: Cronista.com