Una red ya protege la ruta 40 a Villa La Angostura

Los trabajos en la ruta nacional 40 terminarán hacia fin de mes, promete Vialidad Nacional. En julio una parte de la ladera de un cerro se desprendió y por milagro no fue una tragedia.

A las 15.03 del 23 de julio pasado, la tierra se movió a la altura del kilómetro 2094 de la ruta nacional 40, tras la caída de un enorme bloque de piedras. Las imágenes del derrumbe dejaron con la boca abierta a las personas que se encontraban en el lugar. Y asombraron al país. Nadie salió lesionado por la oportuna intervención del capataz de Coarco, Alejandro López, y los operarios de la empresa que bloquearon el tránsito.

Por el derrumbe, ese tramo de la ruta –que comunica Bariloche con Villa La Angostura– estuvo intransitable durante 29 días y generó numerosos trastornos. Para evitar un nuevo derrumbe en ese sector inestable, los técnicos de Vialidad Nacional resolvieron proteger el macizo de piedra. Los trabajos para revestir con mallas metálicas esa ladera, que se levanta al costado de la ruta, comenzaron en septiembre pasado.

 

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La responsable de prensa de Vialidad, Pilar Orelogio, informó que esta etapa de la obra finalizará a finales de octubre, “si el clima acompaña”.

Explicó que los operarios de la empresa Paramassi están revistiendo esa ladera con “malla de alambre de acero de triple torsión reforzada con bulones y cables de acero”. Afirmó que la superficie intervenida alcanza a 8.334 metros cuadrados. “No es una pared perfectamente lisa, entonces se hacen cálculos de pendiente y rugosidad, no solo de altura y ancho”, describió Orelogio. Recordó que la ladera tiene unos 150 metros de ancho y 70 de alto, y desde esa altura se colgaron las mallas.

“La malla de alambre de triple torsión se emplea como sistema de protección frente a la caída de pequeñas rocas. Estas mallas están constituidas por alambres de acero (galvanizados para evitar su erosión) que se enlazan entre sí mediante triple torsión, de manera que configuran una retícula hexagonal”, explicó.

Detalló que los bordes de cada “paño” están reforzados con alambre de mayor espesor que el resto del “tejido” para proporcionar mayor resistencia y facilidad de unión entre paños adyacentes.

 

Inversión

50.000.000 de pesos es el costo estimado de los trabajos de remoción del material que se desprendió y las reparaciones.

Sostuvo que una vez desplegadas las mallas y abulonadas a la ladera, para copiar la forma de la superficie, se hace un revestimiento con cables de acero, de 8 milímetros de diámetro, agarrados al contratalud por medio de anclajes (perforaciones de entre 3 y 6 metros).

Agregó que van formando “una cuadrícula dispuesta sobre la malla, lo que refuerza aún más su resistencia y vida útil”.

Comentó que ahora “están trabajando en la colocación de pernos para la segunda etapa que es el refuerzo con la red de anillos, que se coloca sobre la malla y permite doble refuerzo en las zonas más conflictivas”. La empresa además colocará un sistema de barreras dinámicas.

Orelogio aseguró que la inversión asciende aproximadamente a los 50 millones de pesos, “incluyendo la etapa de saneamiento y los barrenos para las detonaciones, previo a la habilitación de la ruta”.

Dijo que la tarea está a cargo de un equipo de 5 profesionales con experiencia en trabajos de sistemas de protección de taludes, con capacitación en trabajo vertical y técnicas de escalada. Todo bajo la dirección de un jefe responsable de obra y con el apoyo de instaladores de la empresa matriz, que tiene su sede en España.

Usan equipos de perforación y extensores de gatos mecánicos (fabricados en talleres de Villa La Angostura) para las tareas de saneo y volcado de rocas .

Fuente: Diario Rio Negro