Bajó fuerte el ritmo de obra pública en Santa Fe y estiran los pagos
«Sólo avanzamos en lo que podemos pagar», admitió el ministro de Economía de Santa Fe.
El pedido del equipo del gobernador electo Omar Perotti a la actual administración provincial de que no avance con nuevas licitaciones de obras públicas a raíz de la tormenta financiera concentró la atención de las discusiones por la transición, pero en realidad la situación del sector de la construcción pública ya es delicada.
“El ritmo de obras lo hemos bajado a lo que estamos en condiciones de pagar”, reconoció a punto biz el ministro de Economía de Santa Fe, Gonzalo Saglione. En efecto, desde las Paso –y la disparada del dólar y las tasas de interés prácticamente no se realizaron nuevos llamados a licitaciones en obras menores y medianas (de $20M a $50M). Y en las grandes que ya habían sido convocadas no se avanzó en adjudicaciones. “Los pagos los estamos haciendo con 15/20 días de mora cuando antes veníamos pagando en plazo”, agregó el ministro.
Saglione responsabilizó al recorte por el incumplimiento del gobierno nacional en el envío de fondos prometidos. “No podemos seguir soportando la demora en el aporte nacional de $5.800M pendiente del sistema previsional correspondientes a 2018 y que según el presupuesto nacional 2019 (art 72) debió transferirse antes del 31 de marzo. Y por otra parte también nos afectó los u$s 20M de Letes reperladas nos quitaron liquidez”, agregó el ministro de Economía.
Los empresarios del sector calculan que el impacto de la parálisis en el empleo de la construcción se notará hacia fin de año, y todos saben los socialmente delicado que es diciembre en Argentina. Pero además, hay otro problema que anticipan los hombres de negocios: si se paran obras, reactivarlas puede insumir unos cuatro meses, lo que también supone un arranque del año próximo dificultoso para las obras públicas.
Así y todo, la situación en la construcción pública en Santa Fe –tanto en actividad como en mano de obra empleada- es considerablemente mejor frente a lo que ocurre en otras provincias, según coinciden los empresarios del sector y los informes de Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric).
En ese marco, las Cámaras de la Construcción de Rosario y Santa Fe prerieron mantenerse al margen de la polémica que activó el equipo de transición de Perotti, pese a que los quisieron involucrar enviándole cartas avisando del pedido que hicieron de que no se inicien nuevas obas. No obstante, hay coincidencia entre los empresarios del sector en que –si bien la situación financiera es delicada- hay con esta movida una sobre actuación política del equipo del gobernador electo con el único fin de desgastar al gobernador Miguel Lifschtiz como futura gura de la oposición al justicialismo.
Fuente: Punto Biz (Santa Fe)
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