Catamarca: Por la inflación se perdió el 50% de las redeterminacones de precios

Para las pymes de la construcción, la deuda se licuó por la inflación.

La Cámara del sector dijo que estos fondos son capital de trabajo y que ya no forman parte ni siquiera de ganancia.

El presidente de la Cámara de la Construcción de Catamarca, Julio Córdoba, se refirió a la deuda  en concepto de redeterminación de precios para la ejecución de viviendas y opinó que solo con la devaluación del año pasado, “ya se licuó en un 50%” de los fondos. Estimó además que con la inflación estimada para este año –que rondaría el 30%- la situación “será peor”.

“Estamos hablando de 260 millones de pesos a valores de abril de 2016. Con la devaluación del año pasado nomás ya se licuó en un 50%, con la inflación de este año que se estima superior o en el orden del 30% será peor”, vaticinó Córdoba.

La cifra, para nada despreciable para las pymes locales, corresponde a la actualización de precios por obras avanzadas y otras concluidas en relación a la ejecución de viviendas sociales, que habían sido licitadas entre 2014 y 2015, y que se vieron afectadas por la corrida inflacionaria.

Según indicó, la deuda data de 2016. Si bien hasta el año pasado las pymes locales penaban por la demora en el pago de la certificación de obra, que avala el avance de ellas, el trámite se agilizó, no así la deuda por la redeterminación de precios.

Córdoba señaló que los certificados de obra están prácticamente al día, pero fueron confeccionados con valores de abril de 2016, “quedan pendientes las redeterminaciones de precios que deben ser aprobados por Nación”, remarcó.

“Esa deuda para las empresas no es más que capital de trabajo, porque ya no es ni beneficio. Es el capital que las empresas tienen para encarar alguna obra nueva, alguna inversión en equipamiento, o pagar deuda que sucede en la mayoría de las empresas”, apuntó el titular de la Cámara de la Construcción.

Córdoba ya había señalado a El Ancasti un panorama preocupante para la actividad que habla de la pérdida de más de 2500 empleos en los dos últimos años y advirtió que si no se acelera la licitación de más viviendas, tras la finalización de las obras que hoy cuentan con un avance del 95%, en 30 a 60 días no tendrán más actividad. Si bien admitió que le constan las gestiones realizadas por el Gobierno local para acceder a nuevo financiamiento, dijo que las nuevas licitaciones están estancadas.

Señaló que las empresas que actualmente están en obra atraviesan un complejo problema financiero. Admitió que hay muchas empresas que están replanteándose la situación y que trabajan con un nivel mínimo de personal.

También fue crítico con la política de Gobierno nacional en materia de vivienda, tanto de ejecución pública como privada.

“El Gobierno anterior manipulabas los índices de precios y perjudicaba a las empresas, este Gobierno tal vez no manipula los índices de actualización, pero el daño es el mismo”, aseguró.

Córdoba cuestionó que la situación repercutió en la posibilidad de incentivar la construcción privada.

“Este Gobierno prácticamente desactivó los planes nacionales apostando a que la financiación iba a ser a través de los bancos, pero por más que implementaron los créditos UVA, hoy pensar en financiar una vivienda que sustituya a los planes de vivienda que se hacían anteriormente con recursos de Nación, es impensable”, dijo.

En este contexto, señaló que los niveles de actualización de los créditos UVA, muchas veces no superan el grado de actualización de los ingresos salariales y aleja la posibilidad de construir por cuenta propia al asalariado.

“No es que las empresas no analicen otra posibilidad de financiación es que directamente las condiciones del mercado, las condiciones de las tasas y los préstamos son prohibitivas para iniciar ninguna actividad de ese tipo”, señaló.

Mientras el sector se ve afectado por los retrasos y la falta de nueva obra, también destacó que otros factores de la economía vienen complicando aún más el panorama.

Señaló que los altos costos de la energía, afectan a la construcción como a otros rubros de la industria, ya que demandan un alto componente de energía para la ejecución de obras.

Córdoba se mostró decepcionado y señaló que se esperaba que la nueva gestión “que se suponía que tenía experiencia en la parte privada, pudiera implementar medidas que impactaran rápido en la economía. Pero con el nivel de tasas que tenemos ahora es impensable poder financiarse para hacer alguna actividad o desarrollar un plan de vivienda”, dijo.

 

Molina aseguró que en 60 días se pagará

El diputado Carlos Molina (FCS-Cambiemos), negó que la Provincia se fuera a hacer cargo de la deuda que existe con las empresas por la redeterminación de precios. Dijo que esta deuda será pagada por la Nación y comprometió que se hará efectivo en los próximos 60 días.

Señaló que se trata de $319 millones, de los cuales dos acuerdos ya están en marcha y un tercero fue firmado días tras por el Gobierno nacional.

Según indicó, uno de los acuerdo es por la suma de $174 millones; un segundo es por $38 millones y el más reciente de los fondos que se enviarán corresponde a la suma de $104 millones. «Esos $319 millones de redeterminación, ya salieron de la Secretaría de la Vivienda y van al Ministerio del Interior, en el área de Infraestructura y de allí pasarán a Hacienda, para que se pague», detalló y estimó que este proceso finalizará en unos 60 días.

Destacó además que el Gobierno nacional aprobó en septiembre de 2016 una licitación por 450 viviendas por un monto de $277 millones, cuyos fondos son nacionales. De esta licitación aseguró que se pagaron $255 millones.

«Es todo verso, quieren hacer creer que la provincia está pagando las redeterminaciones cuando no es cierto», cuestionó en alusión a los empresarios. Señaló que esta mora es por responsabilidad de la gestión anterior que licitó viviendas, pero no otorgó el financiamiento. «Nos tuvimos que hacer cargo de la deuda de certificación de obra y de la redeterminación de precios», dijo.

Fuente: El Ancasti